VI

Miro por el ojo mágico y los veo, ahí están, son ellos, ahí están. Voy por mi pistola, voy, tomo el maletín con el encargo, y me termino de un sorbo el vaso de leche chocolatada, me lo termino. Tocan de nuevo la puerta, reviso que todo esté en orden, esté. Abro la puerta, y escucho el bello bang bang proveniente de mi arma. Los bastardos caen al suelo, caen, y yo salgo corriendo. llego hasta el estacionamiento, ya mataron al guardia de turno,mataron, es el quinto este mes, y cada vez cobran más caro, y por lo tanto sube el arriendo,sube maldita sea. Mierda, deje el Stereo encendido, subirá la cuenta de la luz, subirá. Mierda.

-Hola mi amor- La beso y entró a su departamento, aún tiene aquel horrible tapete oriental que nunca me gustó- Ya está hecho, los dos bastardos están muertos, les disparé a quema-ropa, y corrí en seguida, total nadie sobreviviría, total. Ahora debemos inculpar a ese maldito loco de mierda de Lud Big Bang debemos inculpar. tan solo debes quitarle las pastillas y nadie sabrá que fuimos nosotros, tan solo debemos procurar inculparlo, debemos.

-Muy bien por lo de Ludovico no te preocupes yo me encargo de él cariño- lo que si me tiene preocupada es otra cosa.

Odio cuando se pone así - ¿qué cosa mi amor? - le pregunto como si fuese una bobería.

-¿Qué mierda tienes en la cabeza maldito zángano del infierno?, no te das cuenta de que debías haberte serciorado de que estaban realmente muertos, esos cabrones son más duros que cualquier otro cabrón-duro de esta ciudad.

-Ahora entienden por que odio cuando se pone así, entienden - Callate, Puta!!- la golpeo con una patada en el estomago - esos cabrones están muertos, y muy pronto Isidor, Hijo de Perra, Sofía y los demás también lo estarán, nosotros sólo debemos hacer nuestro trabajo, debemos, y muy pronto estaremos nadando en dinero. Y recuerda, Puta, ni una palabra, si el jefe sabe que metimos la pata, morderemos nuestros propios intestinos para soportar el dolor de lo que nos hará. Solo encargate de que crean que Lud Big Bang lo hizo, encargate.

Ocho días despues. Recibo una llamada de Ella, y me dice que no vuelva a mi departamento,que no vuelva, porque Isidor va para allá. Le hago caso y voy a su departamento, al llegar allá, tiene puesta una de esas mascaras de teatro chino o japonés, da igual. Hay mucha sangre por todos lados,hay, afuera llueve, desde el viernes que llueve sin parar. Planeamos como seguir con vida, y llegamos al acuerdo que nos juntaremos a las seis y media de la tarde en el Bar de Lou al día siguiente, nos juntaremos. Sin duda allí encontraremos protección.

Lo que no me queda claro es, ¿quién carajo le informó a isidor que habíamos matado a Dedos de Bala y Perrojo mal Ojo,quién?

V

Ocho días antes de que ese maldito cabrón quita-vidas, llamado Franko Irivarianovish, más conocido como Frankie dedos de bala, le reventara la cabeza a un maldito traficante llamado Gary, Isidor Malinkovish tenía un grave y jodido problema en su grave y jodida vida, no encontraba el control remoto de su jodido televisor, y eso si que es una situación jodida, pero luego de veinte-busca-que-te-busca-minutos lo encontró, pero no sólo encontró su control remoto, si no que también encontró una maldita nota que hasta el momento había ignorado, la nota decía:

"Querido señor hijo de la gran ramera, más conocido
como Isidor Malinkovish:

Lo mataremos dentro de los próximos 6 días, como ya hicimos con sus buenos amigos Frankie Dedos de Bala y Perrojo mal Ojo.

Saludan atte. los que te romperan los huesos y te harán
dormir con los malditos atunes. "

A Isidor no le importó lo de la amenaza, y salió corriendo a buscar a quienes habían matado a sus amigos. Grave error. Nunca ignoren una amenaza de muerte queridos lectores, nunca la ignoren, y si lo hacen, quiero que sepan que serán los mayores cabrones-comete-errores de la maldita y estúpida tierra.

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Ya son las nueve de la mañana, y no he dormido nada en toda la noche, me tomo los primeros dos "transpsichoviol" del día, me levanto de la cama y me pongo las botas, y me aseguro de que la magnum 44 esté cargada. Seis balas, la dosis precisa. escucho al hijo de puta del tiempo decir que el viernes lloverá, y a mi si que me gusta la condenada lluvia.

"Ding-Dong"- Puto timbre. Abro la puerta. es Perrojo mal Ojo.

-¿Dormiste algo anoche?- Me pregunta el muy imbecil- tienes una maldita cara de los malditos mil diablos.

-Preocupate de tu maldita cara y dejame en paz. ¿Hablaste con ese cabrón de Gary? -No sé por que le pregunto, ya sé la respuesta.

- No, si para eso te vine a buscar, para que fueramos los dos.

Media hora más tarde, el Mustang '78 king cobra ruje por las calles de la ciudad vieja en dirección al departamento de Gary. Llegamos al edificio y bajamos hasta el estacionamiento, matamos al guardia de turno, nos comemos su comida, y le robamos sus cigarrillos, subimos por el ascensor hasta el piso treinta y tres y tocamos la puerta del departamento tres mil trecientos ocho. Sale Gary y nos da tres balazos en el abdomen a cada uno, deja la música encendida, cierra la puerta y sale corriendo.

IV

Doy vuelta algunas mesas para cubrirme de los disparos de Lud Big Bang. El bastardo mata a una chica que bebía una soda junto a su novio, un punk de corta edad, la chica sangra mucho por la herida y el joven punk se avalanza sobre Lud, quien sigue disparando a todo lo que se mueva y se ríe de forma muy-muy-lunática, el joven no logra vengar a su novia muerta y cae al piso inconsciente por un puñetazo en la sien.

Llego hasta la barra y me introduzco la navaja en la herida y logro sacarme la bala, abro una botella de vodka, bebo la mitad de un trago y la otra mitad me la vierto sobre la herida, maldita sea, duele como el carajo!!. Por un segundo pienso "vodka, cerveza y pizza no es una buena combinación para mi malogrado estómago". La herida está limpia y Lud sigue matando y golpeando gente sin motivo alguno, ya no tiene balas pero ahora ocupa sus manoplas, lo veo peleando con Francisco Zaraphasikov, un ladrón de poca monta del lado norte de ciudad nueva, es mi oportunidad. Corro hacia él con mi navaja centelleando como una maldita estela de fuego reflejando la maldita luz del maldito sol que se cuela por las grietas de la gastada pared de madera, le doy un corte bien bueno y le hago una herida bastante profunda y de unos treinta centimetros de longitud en la espalda, el bastardo sangra mucho y se le desorbitan los ojos por causa del odio, me va a propinar un machetazo en toda mi mal nacida cara, mas es intervenido por una patada giratoria del joven punk , Lud cae al piso y el machete sale disparado, el joven punk lo golpea en el rostro hasta dejarlo como un mal nacido coral. Francisco Zaraphasikov saca al joven de encima de Lud, yo tomo a este último en andas y me largo de "Don Casimiro".

Las dos menos cuarto de la tarde, estamos Lud y yo en mi casa, ya nos sanamos las heridas y Lud ya tomo su olvidado medicamento, "transpsichoviol", el mismo que tomaba Frankie.

Le cuento lo de Frankie y Bob, Lud no lo cree y maldice a Gary y a la muy perra. Promete ayudarme a vengarlos.

Las cuatro y cuarto de la tarde, nos subimos al Ford thunderbird de mi propiedad, y nos dirigimos al "Bar de Lou". Estamos a veinte minutos y llegamos en cinco. Entramos y entregamos nuestras armas a Lou, tal cual dictan las reglas de la casa, pedimos la especialidad de la casa, dos "Dance in California" con bala calibre 22, lo bebemos de un sorbo y quedamos bastante bien. unas mesas más allá Sofía hace negocios con Hijo de Perra, se ven bastante alegres, seguramente aún no se enteran de lo de Frankie y Perrojo.

Hacemos un par de ciertas preguntas a un par de ciertas personas quienes nos dicen que la muerte de Frankie y Bob fue a causa de un malentendido, y cierto embrollo relacionado con la destilación ilegal y leche chocolatada traída desde Sudamérica. Al menos ya sabemos por que los mataron, y también sabemos que ese hijo de perra de Gary morirá de forma muy muy dolorosa, y como estamos en el "Bar de Lou", y debemos dejar nuestras armas en la entrada, su muerte será bajo nuestras propias manos, sin pistolas, sin navaja, sin machete, a mano limpia.

Dos horas más tarde al fin entra lo que estabamos esperando, ese maldito bastardo de Gary, lo miro, y miro a Lud y veo que también lo está mirando, el muy bastardo entra con cara de felicidad, la que es borrada de inmediato por una bala proveniente de la magnum cuarenta y cuatro de Frankie que le vuela la cabeza de un solo disparo, el mismísimo Frankie está parado afuera del bar y Perro Ojo mal Ojo está a su lado fumando un cigarrillo.

III

Odio ese maldito sofá desde el primer día que entré a beber una copa con este bastardo. Brenda Lee suena en el stereo, diciendome a todo pulmón que es su fiesta y hace lo que quiere, mientrás mis pies pisan una notable mancha de sangre seca. Camino por el departamento y compruebo que está vacío. ¿Donde está Gary?, ¿donde se habrá metido esta asquerosa rata?. Voy a la cocina y me preparo un buen café, importado desde algún país tercermundista. lo bebo en el balcón y me fumo el último de los cigarrillos del guardia, debo dejar de consumir ambos urgentemente, mi médico me cortará las bolas cuando sepa mi excesivo consumo de café y cigarrillos. Ya casi no llueve, pero ha empezado a correr mucho viento, me dió un poco de frío así que vuelvo a entrar al departamento. Apago el cigarrillo en el brazo del sofá y escupo un poco de café en uno de los cojines. Entro a la habitación de Gary, le robo un poco de droga y dinero, los únicos que encuentro a mano. Abro su armario y decido llevarme su mejor abrigo, y pienso "nada como el cuero, Malinkovish, nada como el cuero. En el estacionamiento me encuentro con un bello Pontiac del '73, no es un Firebird, pero se ve que es un buen auto. Veinte metros más allá veo el Chevy Nova, que le robé a la muy perra, y me siento un poco triste por no poder combertirlo en submarino. Me subo al Pontiac y avanzo hacia la salida, me detengo justo entre ésta y el Nova, me bajo del auto y me dirijo a este último, abro el tanque de combustible y orino.

Diez de la mañana. El Pontiac está hecho mierda contra un muro, y tengo mucha sangre seca en mi rostro, seguramente proveniente de mi cabeza, lo demás parece estar todo en orden. Debo haberme quedado dormido al volante hace unas cinco horas. Maldición, precioso tiempo desperdiciado. Dejo el auto tirado, y corro, me meto a un bar llamado "Don Casimiro", pido una cerveza y algo para comer, me dicen que lo único que hay en el menú es Pizza, eso me alegra un poco. Mientrás traen mi orden pregunto donde está el baño - Al fondo a la izquierda- me dice el cantinero, y me enojo al estar bebiendo y comiendo en un bar mal construido; todos saben que el baño siempre debe estar al fondo a la derecha. Me limpio la sangre, y cago tan hediondo como si hubiese comido mierda.

Ha sido una mala noche desde que sali de la caseta del guardia. Me trago la pizza en menos de un segundo y bebo tres jarras de cerveza. De pronto escucho la campanilla de la entrada. Ruego al cielo porque sea Gary, aunque algo me dice que no lo es. Y doy en el clavo, es Lud Big Bang.

-Hola Lud- le digo desde mi mesa y lo invito a sentarse conmigo. dos segundos despues el bastardo me sonrie y me da un tiro en el hombro, caigo al piso y saco mi navaja. Esto cada vez se pone mejor.

II

Me paso una maldita luz roja y dos cuadras más allá un policía me para, lo soborno con 20.000 y el muy bastardo me deja en paz, mientrás se aleja, le lanzo un escupitajo que se confunde con las gotas de lluvia, pero el saber que escupí al maldito cerdo me hace sentir muy bien, tanto así que no me dan ganas de buscarlo, matarlo, y recuperar los 20.000 y parte de lo que mis impuestos pagan anualmente, aunque ahora que lo pienso, creo que si lo haré, pero primero, lo primero, matar a Gary.

Llego al edificio del hijo de puta, bajo con el Nova hasta el estacionamiento y lo dejo aparcado en un buen lugar, justo en frente de la salida, me saco la chaqueta y le sacudo las gotas de lluvia, y me digo a mi mismo, - nada como el cuero, Malinkovish, nada como el cuero - , la pongo bajo mi brazo y camino en dirección a la caseta del guardia del estacionamiento, le corto la garganta, me bebo su café, como lo que queda de la hamburguesa que se estaba comiendo y fumo de sus cigarrillos (los míos están mojados), me saco la ropa y la pongo a secar en el calefactor, veo un poco de televisión y afilo a Susan, está todo muy tranquilo, de no ser por los dos sujetos que veo en los monitores de las camaras de seguridad, que roban la radio de un auto en el sector tres del estacionamiento, me importan un carajo.

Tres de la mañana, ya descansé mucho, mi ropa está seca, mi estomago medianamente lleno, el café me mantiene despierto hace tres días y mi navaja podría cortar un tronco como si fuese un trozo de mierda de perro que estubo mucho rato al sol y se deshace al primer contacto. Subo las escaleras y maldigo al bastardo de Gary por vivir en el piso treinta y tres, enciendo otro de los cigarrillos del guardia en el camino, que se me acaba en el piso veintiocho. Finalmente, piso treinta y tres, departamento tres mil trecientos ocho, creo que lo recordaré por un buen tiempo. Pateo la puerta y entro.

I

Y la muy perra trató de reirse de mí, en mi cara, ja!!....- Maldita puta, crees que tú y ese maldito de Gary volverán a burlarse de mí- le dije mientrás le arrojaba la taza de café hirviendo en la cara , para luego ver como se llevaba las manos a su ampollado y sangrante rostro y pidiendo perdón. Ja!!.......creyeron que caería en su sucio juego.......pero no. La oigo suplicar por perdón, pero perdonar a la muy suripanta no traera de vuelta a Frankie y a Perrojo, entonces, ¿qué haré?, lo que mejor se hacer, sacarle la piel ampollada de la cara a la muy perra, total, ¿no es eso lo qué tanto le duele?, si eso es lo que más le duele en este momento, la sucia, mentirosa, traicionera y prostituta piel ampollada de su sucio, mentiroso, traicionero y prostituto rostro.

Termino el trabajo y la tipa esta ya ni siquiera llora, está conciente, pero no se mueve ni hace nada solo mira como las gotas de sangre que caen de su rostro ensucian aquel maravilloso tapete oriental que me gustó tanto la primera vez que vine a acostarme con ella a su departamento. Bebo otra taza de café y me fumo dos cigarrillos y no puedo sacar los ojos de tan bella escena.

La una de la mañana, "showtime" Me despido de un beso en la sangrante y tibia mejilla y siento el sabor de su sangre, limpio la navaja con mi pañuelo y lo guardo, me subo el cierre de la chaqueta y me largo de aquel moderno hogar, bajo las escaleras, nunca me agradó usar los acensores, llego al estacionamiento y me subo al chevy nova de la perra-sin-rostro de allá arriba. Me da lo mismo la lluvia, descapoto el coche y dejo que todo se moje, no me importa, total en unos pocos minuto este auto será un maldito submarino, eso si luego de convertir a Gary en una obra de arte muy muy moderno...........